Las últimas semanas han aparecido iniciativas que han tenido como protagonista la impresión 3D de prototipos. Pero su aportación al campo de la Medicina es anterior al fenómeno que estamos viviendo.
La FDA (Food and Drug Administration) es la agencia del gobierno de EEUU que regula, entre otras cosas, los medicamentos y aparatos médicos. Esta administración ha publicado requisitos en cuanto a los métodos de impresión 3D en el sector sanitario.
Nuestro objetivo mediante el presente artículo es mostrar algunos avances a los que ya se ha contribuido de forma significativa.
Casos prácticos que ya son una realidad
Uno de los campos que más se ha beneficiado es el de las prótesis.
En el caso de estas, se requiere un alto grado de personalización pues cada paciente tiene unas necesidades concretas y distintas. Lo bueno de la impresión 3D es que se pueden realizar todas las unidades de forma independiente, modificando las características. Basta con cambiar el diseño CAD.
Algunas de las prótesis que ya se han presentado con prototipos en 3D son:
- Válvulas coronarias
- Prótesis dentales
- Componentes para la reconstrucción de rodilla
Mediante la impresión 3D de órganos vitales, también se practican operaciones complejas y se preven posibles complicaciones, lo que minimiza los riesgos reales.
Otro de los campos es la administración farmacológica.
Se ha trabajado sobre un software en el que se incluyen los datos de los pacientes como su peso, el funcionamiento de sus órganos, etc. En tales datos se basan los medicamentos impresos en 3D.
Así, se consigue que la fabricación de medicamentos sea específica para cada usuario, en lugar de almacenar mucho medicamento con fórmulas genéricas. También permite el estudio de compatibilidad de fármacos en el caso de los pacientes que deben administrarse varios de ellos a diario.
En Industrias AM participamos en todo tipo de proyectos de impresión 3D de prototipos.
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